Pellicer: “No es momento de discursos, sino de hechos”
El técnico malaguista atendió a los medios a dos días del partido ante el Racing de Ferrol, dejando claro que el encuentro es clave para el devenir de la temporada
El Málaga CF afronta este sábado uno de los cruces de mayor importancia en lo que queda de campaña. Los de Sergio Pellicer reciben a un Racing de Ferrol prácticamente condenado al descenso, y que sabe a ciencia cierta que el partido ante el conjunto blanquiazul es una de sus últimas opciones de mantenerse enganchado a la lucha por la permanencia. Para el conjunto local, el partido también ha cogido tintes de final, especialmente por los resultados de las últimas semanas. Tres jornadas sin conocer la victoria, que han reducido la distancia con el descenso hasta los cuatro puntos. Sobre la mala racha de resultados, Pellicer ha declarado que “queremos volver a lo que somos, un equipo valiente y atrevido para dar la victoria a nuestra gente. A romper esa barrera de los 40 puntos, a los chicos los veo bien y lo más importante es tener seguridad mental para jugar con determinación. Y esa seguridad la tenemos que transmitir para enganchar a nuestra gente. Y esa magia de La Rosaleda”.
Sobre la posible vuelta de Manu Molina, el entrenador de Nules aclaró que «sí va a poder estar en convocatoria, a partir de ahí decidiremos». El gaditano volvió esta semana a los entrenamientos después de superar una lesión, y todo parece indicar que volverá a disfrutar de minutos este fin de semana. Su vuelta se antoja clave para que el equipo vuelva ser reconocible, sobre todo ante un rival que ha conseguido buenos resultado lejos de A Malata: “Creo que tiene su última oportunidad aquí. Sus dos últimas victorias fueron fuera de su feudo, en su estadio les está costando, pero máximo respeto y empatía al rival. No porque tengan un puntaje muy bajo va a ser fácil».
A pesar de la difícil situación del rival, Pellicer advierte: «es un partido trampa, pero no me preocupo del futuro. El presente es Ferrol. Con Tenerife y Cartagena son equipos en una situación muy complicada, pero seríamos enemigos de nosotros mismos si pensáramos que va a ser fácil».
Por último, ha destacado el esfuerzo de la afición, que hará de La Rosaleda una olla a presión un día más: «agradecer a la gente, siempre. La crítica hay que entenderla y empatizar. Hicimos pasar un mal fin de semana a muchísima gente. Es normal» y cierra: «tener calma, y no lo que nos pasó el último partido aquí con el Cádiz. El equipo, en resultados adversos, está vivo. Hay que estar a la altura y la exigencia que nos marca la afición”.
