Ibón Navarro: «Manresa no es el mejor equipo para volver a la competición»
El entrenador de Unicaja reflexionó sobre la situación del equipo tras proclamarse campeón de la Copa del Rey
El baloncesto retorna al Martín Carpena tras un mes sin actividad en el feudo malagueño. Los aficionados cajistas podrán volver a ver a su equipo tras la consecución de la Copa del Rey en Gran Canaria. Será el retorno a la competición tras aquella mágica noche del 16 de febrero. El equipo consiguió un título de renombre, pero la temporada no ha finalizado y quedan todavía varios frentes abiertos. El más inminente es el partido de Liga Endesa que le enfrentará al BAXI Manresa este domingo 2 de marzo.
Empezaba la rueda de prensa con una interminable lista de jugadores tocados y la baja confirmada de Alberto Díaz para el domingo. Desde el club están contentos con el progreso del pelirrojo, pero lo reservan para el siguiente domingo por precaución. Respecto a Sima y Barreiro se muestran optimistas con su mejorías, a pesar de sus molestias. Kalinoski tuvo un susto en el entrenamiento del lunes y Dylan tiene dolores en la articulación que no le permiten entrenar al cien por cien.
Respecto a la resaca post Copa del Rey confesaba lo siguiente: «Hay que hacer una digestión rápida porque esto no se para. A todos nos gustaría que se acabase la temporada ahora y celebrar, pero esto no se para. Creo que los días libres han podido venir bien para intentar resetear, pero las competiciones siguen con rivales que nos van a exigir mucho como Manresa o lo que nos viene en BCL».
Ibón confesaba que el equipo volvió a los entrenos a mejor nivel del que esperaba: «El primer día pensábamos que iba a ser un poco de vuelta al cole, pero estuvieron mejor de lo que esperábamos. Ayer, que fue el cuarto entrenamiento seguido y fue el doble, la verdad es que fue bastante mejor de lo esperado. Vamos a ver el día libre cómo nos sienta, a ver si podemos recuperar a la gente tocada. Luego enfrentaremos los dos entrenamientos para preparar el partido del domingo. En principio he visto a la gente bastante bien y con la cabeza bastante limpia, así que por ahí mejor de lo esperado».
Sobre su rival, reconocía que Manresa no era el mejor rival para retornar a la competición: «Es un equipo que nos va a exigir a nivel físico 40 minutos, un equipo que tiene un nivel y una cantidad de pases en sus ataques que te exige mucho, que toca pintura con mucha facilidad, que es capaz de cambiar el balón de lado dos o tres veces en cada ataque, te ataca en los primeros segundos, te genera muchas situaciones de missmatch en los primeros segundos, un jugador como Derrick Alston que te obliga a tener a jugadores fuera de posición, un equipo muy incómodo que, si además tiene acierto desde fuera, juega con muchísima confianza».
Tampoco le echaba demasiada cuenta al precente de esta temporada frente a Manresa: «No pienso en las cosas mentales, yo estoy pensando en el baloncesto y lo que nos va a obligar a hacer no es lo más cómodo para nosotros. Ojalá que exista ese punto mental, pero no es algo a lo que nos vamos a agarrar para preparar el partido. Nosotros tenemos que pensar en el nivel de baloncesto que tenemos que hacer para competir con ellos y eso nos lleva a un nivel de exigencia muy alto».
Avanzaba su comparecencia analizando el calendario del equipo en este mes de marzo: «No vamos a tener demasiado tiempo para entrenar. Prácticamente los partidos son los que nos van a generar ritmo de competición y ritmo de juego. Creo que estamos haciendo un trabajo que igual nos lleva a no tener muy buenas piernas el domingo, pero es lo que tenemos que hacer de cara a cargar un poco la mochila para este mes, no vamos a tener mucho. Todo va a ser preparar, jugar, recuperar y volver a preparar, así que lo que hemos hecho esta semana nos tiene que servir de inversión. Por eso insisto que no vamos a llegar con las mejores piernas al partido del domingo y que no va a ser el mejor partido para nosotros».
También tuvo tiempo para elogiar a Saint-Supery, a quien ve como un jugador muy maduro para su edad: «Seguro que va a querer hacer un buen partido, seguro que va a querer ayudar a su equipo a ganar y si es con una buena actuación pues mejor. No creo que le vaya a afectar demasiado, creo que está bastante maduro, estuve con él hace unos días ahí en Madrid y le vi bastante tranquilo, así que no creo que le afecte mucho».
Continuó analizando lo que puede aportar a Manresa su nueva incorporación, Armel Traoré: «Aunque hablan mucho de una referencia interior, como cinco, creo que les va a ayudar más en el poste de cuatro, incluso dándole más minutos al tres. Creo que incluso pueden jugar otros juntos, bueno, hay que ver qué encaje tiene. Creo que es un buen jugador, que le va a dar intimidación, atleticismo, jugar por encima del aro. Lo malo es que no lo vamos a poder ver hasta que lo tengamos aquí delante.
Volviendo al partido del Nou Congost, Ibón tampoco quiso hacer demasiado hincapié y afirma que su equipo no jugó aquel partido. «Ellos jugaron increíble, un nivel de acierto, de intensidad, de energía, nos superaron. Creo que nosotros no comparecimos allí, así que hablar de en qué hemos mejorado cuando por el camino hemos ganado un título, pues creo que da para un libro, no da lugar a la pregunta porque creo que no estuvimos allí, no fuimos.
Concluyendo, el técnico vitoriano comentó distintos aspectos del juego que podrían ser clave en el choque del domingo, como la gestión del balón y las pérdidas de su rival: «Creo que es un equipo que pierde muchos balones porque también arriesga mucho y, en ese riesgo que ellos cogen, sacan mucho rédito. Creo que les renta tomar esos riesgos que ellos corren. También creo que es un equipo que se siente muy cómodo bajo presión, al balón, en las líneas de pase, porque están acostumbrados a eso, ellos entrenan así y están bastante acostumbrados y son muy buenos en la ocupación de espacios, en el juego sin balón, en las recepciones dinámicas».
Para finalizar, Ibón apostillaba diciendo que el rebote le parecía el factor más decisivo del encuentro: «Creo que es un factor importante (las pérdidas), pero no creo que sea más importante que por ejemplo el rebote. Creo que el rebote sí que es algo que puede marcar mucho el ritmo de partido y el control de los ritmos. A pesar de que los dos equipos nos guste jugar a posesiones altas, creo que el rebote puede marcar una diferencia en cuanto a quién maneja y se siente más cómodo con ese ritmo.