El presidente de la AFE vendió a los futbolistas a la patronal ante LaLiga
Salen a la luz los mensajes en los que Tebas confirma que David Aganzo vendió a los futbolistas a la patronal en plena crisis del coronavirus. Durante estos días el presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) se ha escondido debajo de una piedra evitando así eludir las aclaraciones sobre la noticia en la que se denuncia que el sindicato de jugadores se habría ofrecido a jugar a puerta cerrada partidos con solo 48 horas de descanso y con un aumento de retribuciones para los jugadores. Lo último que hizo Aganzo fue discutir, de manera acalorada y perdiendo las formas, con un periodista de la ‘COPE’ que destapó la noticia.
Pese a que miembros de su junta directiva y jugadores que forman parte del sindicato, a los que tiene defenestrados, le han pedido públicamente que salga a desmentir lo publicado entre otros medios y en concreto ‘OKDiario’, Aganzo ha callado. Ahora ese mismo medio ha hecho público un mensaje de whassap en el que el presidente de la AFE, al que últimamente le han colocado el apodo de Michelín, queda absolutamente en pañales. En ese mensaje se lee claramente como Javier Tebas, al que Aganzo se aferra como a clavo ardiendo ante su distanciamiento definitivo de su mentor Luis Rubiales, comunica a los presidentes de clubes de LaLiga que la propuesta del presidente de la AFE no solo es seria y formal, sino que además se permite el lujo de decirle «no digas gilip****ces, esto no es un casino, seamos serios».
En ese mismo mensaje enviado a un representante de los clubes, Tebas, descalifica a Juan Antonio Alcalá de la ‘Cadena COPE’, al que llama PortaCOZ de Rubiales, lo que deja muy claro la conexión que mantienen hoy en día, de manera sorprendente patronal y el presidente del sindicato. Tebas, deja tirado a los pies de los caballos a un David Aganzo al que ya solo le queda dos caminos el lógico, que sería la dimisión o salir a desmentir, si puede, al propio Tebas, algo que no parece querer hacer, ya que sería ponerse de malas con el único que, a su juicio, le puede ayudar a salvar su poltrona. Esta no es más que la última puñalada trapera de un presidente de mentirijillas que fue colocado a dedo, que ha perdido todos los apoyos por su ansia de poder y su despotismo para trabajadores de la entidad y miembros de la junta directiva a los que no consulta, mientras se ha rodeado de una guardia pretoriana de amigos y vasallos. Uno de las voces críticas del sindicato ha manifestado a SportDirect Radio: «Está todo tan lejos del fin único de un sindicalista que, supuestamente, utiliza la AFE para sus intereses particulares, incluidos desmanes económicos para uso de la presidencia nada acordes con la mayoría de los futbolistas afiliados de Segunda B, Tercera e, incluso, de Segunda División, que cada vez se sienten menos representados por él».