Un Málaga gladiador en Cartagonova y una plaga preocupante

Buen empate que saca el conjunto blanquiazul de Cartagena merced a un tanto de Jozabed en el minuto 80 (1-1) y la peor noticia, de nuevo, las lesiones

El Málaga se está acostumbrando en exceso a las plagas. Polémicas arbitrales, dudas, asuntos extradeportivos… y también las bajas. Las lesiones siguen azotando a un equipo de Pellicer que, pese a todos los numerosos contratiempos, compite y eso lo hace muy bien. Esta vez, en Cartagonova, logró desbloquear una misión importante que necesitaba la plantilla: reaccionar con el marcador en contra. Tras una primera parte para olvidar, el entrenador blanquiazul cambió los cables correctos después de un planteamiento inicial erróneo para, al menos, rascar un punto frente a un rival directo que sabe a oro. Porque esta es la verdadera liga del Málaga, y está cumpliendo a la perfección.

La ausencia de Escassi protagonizó, en parte, el plan de partido que puso encima de la mesa Pellicer. El joven Quintana fue titular y el equipo tardó en reaccionar. Le costó tomar el liderazgo del encuentro y el Cartagena, muchísimo más necesitado y en zona de descenso, empezó con un punto más de energía. De hecho, en el minuto 2, el Málaga evidenció su falta de intensidad de inicio con una ocasión muy clara para Datkovic frente a Dani Barrio, que regresó a la titularidad en el baile ya habitual de Pellicer en la portería. Pero a los 14 minutos llegó el 1-0, con el remate de Cayarga y el nuevo calvario en la defensa blanquiazul.

Tiene un problema grave el Málaga con los centros laterales, lo demostró también posteriormente. El ex del Eibar De Blasis puso un centro raso al corazón del área, un errático Alexander González no acertó a despejar y el Cartagena se puso por delante. Dos minutos después, el equipo de Luis Carrión prosiguió con su claro dominio y Cristian López se estrelló mediante una chilena en uno de los postes de Dani Barrio. Estaba desaparecido el equipo malacitano, que notó mucho la baja de su buque insignia en la sala de máquinas y Luis Muñoz y Jozabed no conectaron como suelen acostumbrar.

Sí supo hacer algo bien el Málaga, hacer que amainara la tormenta en su peor momento. El Cartagena tuvo el segundo en su mano, pero el partido entró en una fase de toma y daca que alejó el peligro ofensivo de la meta de Dani Barrio. Al descanso se llegó con un 1-0 justo y con una ocasión muy clara para Jairo, iniciada de forma excelsa, llevaba con una clase espectacular por Caye Quintana, que dio un tacón impensable para que el extremo se quedara solo, aunque no pudo superar a Chichizola. Fue un punto de inflexión que el Málaga no aprovechó, pero sí que sacó partido del intermedio en Cartagonova para ordenar sus ideas y cambiar cosas.

Pellicer dio entrada a Scepovic y a Ale Benítez. Se fueron Quintana y Alexander González, de los señalados en la primera parte. Benítez aportó otra cosa distinta en ataque, con buenos centros laterales, aunque en defensa se sigue mostrando algo verde. El Málaga ganó presencia con el ariete serbio y, entre el desorden defensivo, la cosa cambió arriba. Jairo se dejó ver más por la derecha y el juego más directo hacia la meta local se notó. La suerte tampoco acompañó, ya que Matos se estrelló con el palo en un centro-chut a lo Ramón frente al Castellón. El gol estaba más cerca, pero el Cartagena tampoco se encerró y el peligro del 2-0 estaba encima de la mesa.

El Málaga facilitó las contras rivales por su mala salida de balón, las pérdidas y la endeblez en los envíos laterales. En el minuto 74, tras una contra, De Blasis gozó de la opción de cerrar el partido, pero el Cartagena fue cediendo metros con el paso del tiempo. Pellicer reforzó a los suyos con la entrada de Julio y Ramón. La Academia, al poder. El primero dio velocidad; el segundo, orden y talento en lugar de la fuerza de Luis Muñoz. Y con el empuje de todo el equipo, el premio apareció: en el 80′, Julio se llevó la pelota con la espuela, dejó a Jozabed solo en el área y el sevillano superó a Chichizola para hacer un gol vital por la permanencia.

Por el camino, Raúl Navas se fue expulsado por una acción bastante antideportiva en una pugna con Yanis Rahmani y el Málaga se quedó a unos minutos de soñar con el triunfo. Pellicer vuelve a influir, una reacción que vale un punto, un Málaga gladiador que se acerca a la permanencia y una plaga de lesiones que preocupa. Yanis Rahmani, Matos, Jairo… bajas en forma de castigo por un resultado que sabe a oro. Y el Almería, en el horizonte.

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