Muchas cámaras y pocas tomas claras desde el VAR
El Espanyol-Málaga dejó varias acciones polémicas cuyas dudas podrían disiparse con tomas claras de las jugadas
El partido que enfrentó a Málaga y Espanyol se esperaba como un duelo en el que los catalanes, líderes de la categoría, partían como favorito. El guión del partido fue el esperado y los pericos se llevaron los tres puntos en un duelo que dejó lugar a varias acciones de polémica que han provocado cierto revuelo en el seno de la afición malaguista.
El partido comenzó con un Málaga que efectuó una presión alta y que, en el minuto 2, ya había cometido dos faltas. Miguel Ángel Ortiz Arias, colegiado del encuentro, advirtió a los jugadores ante la brevedad de las acciones. Tras ello, minutos más tarde, llegaría una de las acciones trascendentales y polémicas del partido. Raúl de Tomás hizo el 1-0 con un disparo potente desde fuera del área. Todo parecía normal, pero las dudas llegan en el control del atacante, donde parece que impacta en el brazo. Las tomas mostradas por la retransmisión y el escaso número de repeticiones no permite esclarecer la acción, que, tal y como establece el protocolo, fue revisada por el VAR. El juego estuvo detenido un minuto, pero no se mostró una toma en la que se pudiera discernir si era mano o no y el colegiado no fue a ver la acción al monitor.
Poco que destacar en el apartado arbitral hasta el minuto 39. Keidi Bare sacaba la pelota jugada y Escassi cometió falta sobre él. El jugador del Espanyol siguió jugando y Ortiz Arias, a buen criterio, aplicó la ley de la ventaja permitiendo al Espanyol provocar el córner que daría lugar al 2-0 anotado por Puado.
Poco más tarde, justo antes de ir al descanso, llegó otra acción polémica. En este caso se trata de una jugada fronteriza en la que no queda claro si la infracción se comete dentro o fuera del área. En directo, Ortiz Arias asistido por su árbitro asistente número 2, David Bernal Martín, decretaron falta fuera del área. Hay que destacar que si la acción comienza fuera del área y termina dentro, es penalti, al igual que es importante destacar que si la infracción se comete sobre la línea, también debe decretarse la pena máxima. Sin embargo, de nuevo no se ofreció una toma clara de por qué se señaló falta y no penalti y el árbitro del encuentro tampoco fue a ver la acción al monitor del VAR del RCD Stadium.
Justo en esa acción llegaría la primera cartulina amarilla para un Embarba que derribó de forma temeraria a Jairo. En la contra que se produce tras la ejecución de esa falta, Alexander vio la amarilla por empujar a un adversario evitando un ataque prometedor. Ortiz Arias, buen preparado fisicamente, siguió la jugada muy de cerca para poder apreciar el contacto.
El descuento del primer tiempo fue inexistente, algo que parece extraño ya que se revisó durante un minuto la acción de la posible mano de Raúl de Tomás y casi otro minuto el posible penalti sobre Jairo. Sin embargo, Ortiz Arias no estimó oportuno prolongar más el primer tiempo y los jugadores se marcharon al túnel de vestuarios en el minuto 45.
La segunda parte arrancó bastante tranquila en cuanto a faltas. La primera tarjeta del segundo tiempo llegó en el minuto 65 para un Keidi Bare que elevó la pierna y que golpeó a Alexander de forma temeraria cuando este se disponía a despejar la pelota. Ortiz Arias, de nuevo muy bien colocado, aprecio la jugada y mostró la cartulina al ex del Málaga.
En el tercer gol, el segundo en la cuenta particular de Raúl de Tomás, el colegiado madrileño hizo bien en requerir la entrada de las asistencias de inmediato para atender al propio goleador, que había recibido una patada de su propio compañero cuando se dispuso a rematar. Ortiz Arias esperó a que el jugador fuese atendido fuera del área y, al tratarse de un golpe en la cabeza, prefirió acercarse él mismo a la banda a comprobar el estado del jugador y lo autorizó a reingresar en el terreno de juego.
Cerrando el partido, Pol Lozano vio la tarjeta amarilla por sujetar a un adversario sin estar el balón a distancia de ser jugado. Ortiz Arias aplicó ley de la ventaja, pero al perder el balón el Málaga inmediatamente, decretó la falta y mostró la cartulina al jugador local en la que fue la última tarjeta de un partido que tuvo dos minutos de descuentos y que acabó con un total de 25 faltas señaladas y cuatro cartulinas amarillas mostradas.
