Dos rojas, que pudieron ser tres y dos correcciones de VAR en un Málaga-Eibar con ’prórroga`
Sumando los descuentos de la primera y segunda parte, el partido se extendió 13 minutos más ante las pérdidas de tiempo
La SD Eibar visitó el Estadio de La Rosaleda para disputar un partido correspondiente a la jornada 37 de LaLiga SmartBank. El encuentro estuvo dirigido por el gallego Javier Iglesias Villanueva, que dejó una actuación arbitral compleja con una roja por evitar una ocasión manifiesta de gol, un penalti señalado a instancias del VAR y un gol anulado por falta previa, entre otras cosas.
El partido comenzó con buen ritmo de juego y sin demasiadas interrupciones por faltas. Sin embargo, en el minuto 24 Venancio se dolió de un golpe en la cara tras un choque con Vadillo. El jugador estaba sangrando y el árbitro detuvo el juego, pero no ordenó que el jugador saliese del terreno de juego para ser atendido. El partido estuvo detenido durante 4 minutos y medio para atender al defensor, que podría haber terminado de ser atendido fuera del propio terreno de juego para otorgar más ritmo al encuentro.
En el minuto 30 llegó una acción clave en el partido. Escassi derribó a Yannis en la frontal del área, siendo el malagueño el último defensor de la zaga malaguista. El criterio a seguir a la hora de determinar una ocasión manifiesta de gol, tal y como recoge el reglamento, es el siguiente:
•distancia entre el lugar donde se cometió la infracción y la portería;
•dirección del juego;
•probabilidad de mantener o recuperar el balón;
•posición y número de defensores.
Lo cierto es que Yanis se iba a quedar solo delante de la portería de Dani Martín y Ramón parece que no iba a poder alcanzar al atacante, por lo que Iglesias Villanueva lo tuvo muy claro y mostró la cartulina roja.
La ejecución de la falta dio lugar a otra acción clave en el partido. El rechace del lanzamiento de falta cayó en los pies de Corpas, que cuando fue a jugar el balón recibió una patada de Febas en el interior del área. El árbitro no señaló infracción en directo, pero Areces Franco advirtió al colegiado desde el VAR y terminó decretando pena máxima. Las repeticiones desde el VAR son claras y el contacto existe, por lo que la acción deja lugar para pocas dudas. En esta acción, tras el derribo a Corpas, Yanis golpeó con la pierna a Víctor Gómez en el pecho en una acción que pudo suponer la amarilla para el atacante.
En el minuto 42 llegó la primera amarilla del encuentro, que fue para Javi Jiménez por protestar una decisión del colegiado desde el área técnica. La segunda amarilla no se hizo esperar y fue para Ramón, en el minuto 44, por sujetar a un adversario impidiendo un ataque prometedor.
El descuento de la primera mitad fue de nueve minutos, que refleja el tiempo empleado en atender al jugador del Eibar, el tiempo empleado en la revisión del penalti y las dos ventanas de cambio empleadas por el Málaga CF.
La segunda mitad empezó de manera ajetreada. Kevin vio la amarilla en el minuto 49 en una acción en la que golpeó a un contrario, sin estar el balón en juego, de forma temeraria. Lo cierto es que el atacante malaguista se jugó la roja por una acción en la que golpea con el puño en la espalda del atacante. El árbitro interpretó que se trató de un golpeó temeraria y no con uso de fuerza excesiva y amonestó al malagueño.
La primera amarilla para los vascos llegó en el minuto 62 y fue para Toño por un derribo temerario sobre Víctor Gómez. Tras la ejecución de la falta, los jugadores del Málaga reclamaron una mano dentro del área que el colegiado no señaló ya que el futbolista tenía los brazos pegados.
En el minuto 67 llegó el segundo gol de la SD Eibar, que tras revisión del VAR no subió al marcador. Las tomas reflejan que no hay fuera de juego en la acción de gol, pero sí que hay una falta previa en el inicio de la jugada en la que hay un derribo temerario sobre Víctor Gómez. Areces Franco advirtió de ello a Iglesias Villanueva y el colegiado rectificó y amonestó a Llorente por propinar un pisotón a un adversario, de forma temeraria.
Tras la consecución del gol, se sucedieron numerosas protestas desde el banquillo del conjunto local. Iglesias Villanueva expulsó a Luis Muñoz por levantarse del banquillo, yendo hacia la posición del cuarto árbitro con los brazos en alto y voz en grito protestando de forma ostensible una de las decisiones del árbitro y amonestó a Dani Barrio por protestar una de sus decisiones desde el área técnica.
En el minuto 82 Tejero fue amonestado por un derribo temerario, siendo está la última tarjeta para los visitantes. Las últimas amarillas llegaron en el descuento, que fue de 5 minutos. Una de ellas fue para Brandon por una protesta ostensible desde el banquillo, mientras que la última amarilla del encuentro fue para Víctor Gómez por una protesta al asistente n°2.
El partido se saldó con un total de 24 faltas señaladas, 11 cometidas por los locales y 13 por los visitantes. El Málaga CF acabó con un total de siete amarillas y dos rojas, mientras que los vascos terminaron con tres amarillas.
