Un equipo camaleónico, una afición ilusionada con la esperanza del ascenso
Este es el CD Tenerife al que el Málaga se enfrentará en la jornada 40 del campeonato liguero de Segunda División, análisis del cuadro canario
El Málaga visitará al Tenerife, uno de los equipos más duros de la categoría, a domicilio uno de los conjuntos más difíciles del campeonato liguero. El Tenerife es uno de los clubes más consagrados de la Segunda División, con esta, ya suman nueve temporadas en la división de plata del fútbol español. La mejor de las nueve la tuvieron hace cuatro años donde llegaron a la final de la promoción de ascenso. Tras un mal inicio, la pasada temporada finalizaron en la zona media de la tabla, tras la llegada de Ramis el equipo mejoró y evitó el descenso.
El buen desempeño de Ramis a final de temporada le permitió que la dirección deportiva del CD Tenerife le confiase a él la dirección de la plantilla para esta temporada. El plantel ha cambiado notoriamente con respecto a las pasadas temporadas. En el mercado estival, Cordero consiguió cerrar fichajes de renombre como: Alexander Corredera, Mellot, Mollejo, Enric Gallego, Rubén Díez… jugadores que tienen un gran cartel en Segunda División. Además, han conseguido amarrar a los más destacados de la pasada campaña, véase el caso de Sam Shashoua y Aitor Sanz.
Estos jugadores en su mayoria han dado un rendimiento excelso, impregnándose muy bien del ADN de los equipos de Ramis y formando un hueso duro de roer. Un conjunto chicharrero que en este tramo final de temporada ha ganado la fiabilidad suficiente para mantenerse en los puestos altos. Son cuartos con 69 puntos y aún mantienen viva la esperanza de colocarse en ascenso directo. El partido del domingo será la última bala para intentar alcanzar la segunda posición.
El juego del Tenerife se puede definir como camaleónico, son capaces de adaptarse al juego del rival y hacerles daño de la manera que más le dificulta al rival. En casa están siendo un equipo que está puntuando por debajo de lo que necesita, siendo así el décimo. A domicilio son el mejor equipo, lo que reafirma su capacidad de adaptarse al juego rival, ya que en el Heliodoro muchas veces están obligados a proponer. El Málaga deberá hacer un partido muy serio si quiere llevarse la victoria, tapando muy bien las carencias que plantee la planificación.
