Suenan campanas de boda entre el Trops Málaga y GO fit
El acuerdo entre ambas partes proporcionará un lugar donde poder hacer las labores de gimnasio los jugadores albicelestes
Trops Málaga e Ingesport Health & Spa Consulting, S.A., titular de la marca GO fit, han sellado un acuerdo de colaboración deportiva y empresarial por el cual el equipo de División de Honor Plata, la segunda categoría del balonmano nacional, podrá contar con las instalaciones de los Centros Deportivos GO fit de los distritos de Huelin y Segalerva.
El convenio ha sido suscrito por el adjunto a la presidencia de Ingesport, Alfonso Arroyo, y el presidente del Trops Málaga, Alberto Camas, quien ha dado las gracias a la conocida compañía de deporte “por acogernos y prestarnos un servicio tan importante para los jugadores de balonmano”, comentó. Y es que el máximo representante del balonmano masculino en la capital ha tenido una pretemporada un tanto atípica, sin un pabellón estable hasta recalar en el Colegio Los Olivos, y sin gimnasio, debido al cierre de la actividad deportiva del Pabellón José Luis Pérez Canca, incluido su gimnasio, al ser adaptado su uso para hospital de campaña si fuera necesario por la pandemia de la Covid-19. Así las cosas, y después de una estadía sin que los jugadores de la primera plantilla puedan ejercitar la musculación, por fin ha llegado el momento en el que los jugadores del cuadro albiceleste encuentren la normalidad en sus entrenamientos, gracias a los gimnasios GO fit y al Colegio Los Olivos que se ha convertido en el feudo del Trops para esta temporada.
En la visita ayer para rubricar el acuerdo estuvieron Francisco Montero, gerente de los centros deportivos GO fit en Málaga, y Alberto Camas, presidente del Trops. En manifestaciones de Camas, este quedó “encantado por la amplitud, calidad e innovación de las instalaciones” y no pudo evitar hacer la comparación con los Paradores de Turismo, en el sentido de que GO fit “cuenta con entornos y edificios emblemáticos en la ciudad para su actividad, al igual que Paradores”. Uno, en un antiguo campamento militar, el de Segalerva, y otro, frente al mar, el de Huelin.
