Polémica en las dos áreas, protestas de Manolo Gaspar y una rigurosa corrección del VAR en el Málaga-Granada

Gálvez Rascón reflejó en el acta del partido que el director deportivo del conjunto local recriminó la actuación arbitral en el túnel de vestuarios

El Málaga recibió al Granada en La Rosaleda para disputar un partido correspondiente a la jornada 19 de LaLiga SmartBank. El partido estuvo dirigido por David Gálvez Rascón, que tuvo un partido con dos jugadas en las áreas especialmente polémicas.

La primera amarilla del encuentro no se hizo esperar. Llegó en el minuto 9 amarilla a Ricard Sanchez por sujetar a Fomba, impidiendo su avance.

Ya en la segunda parte, en el minuto 56, llegó la primera acción polémica en la que Callejón acaba en el suelo tras un agarrón de Genaro. El jugador del Málaga CF sujetar del brazo al atacante, impidiendo a este jugar la pelota, que se dirigirá hacia él. El colegiado no consideró suficiente el agarrón para penalti y la acción se saldó sin sanción.

La primera amarilla para un jugador del Málaga llegó en el minuto 71 y fue para Escassi, por derribar a un adversario de forma ostensible. Gálvez Rascón, a buen criterio, aplicó la ley de la ventaja para más tarde, una vez el balón dejó de estar en juego, mostrar la cartulina.

Una nueva cartulina llegó en el minuto 75, en este caso para un jugador del equipo visitante. Meseguer vio la amarilla por derribar a N’Diaye, evitando un ataque prometedor.

Una de las jugadas claves del partido llegó en el minuto 81, cuando Loren cayó en el área. Gálvez Rascón señaló penalti en directo para más tarde acabar corrigiendo su decisión tras ser advertido por el VAR, Ocón Arráiz. El árbitro considera que Loren simula haber sido objeto de infracción y reanuda con un tiro libre indirecto y tarjeta amarilla para Loren.

La acción dejó lugar a dos amarillas más, una para Miguel Ángel Rubio por protestar la decisión inicial del colegiado y otra para Manolo Reina, por protestar al colegiado cuando se disponía a revisar la acción en el monitor del VAR.

La última amarilla del partido fue para N’Diaye por derribar a un contrario, evitando un ataque prometedor. El descuento fue de cinco minutos, que refleja el tiempo empleado en las ventanas de cambios y en la revisión del VAR.

El partido se saldó con 28 faltas señaladas, seis amarillas y dos acciones polémicas, teniendo que corregir el VAR la decisión inicial del colegiado en una ocasión. Además, al final del partido, Manolo Gaspar, director deportivo del Málaga CF, recriminó la actuación de los colegiados en el túnel de vestuario, gritando en voz alta “esto es una vergüenza”, según reflejó Gálvez Rascón en el acta del partido.

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