Moli y su trayectoria en el UMA: «Para mí ha estado todo muy iluminado, sabía dónde me metía»
El hasta ahora técnico universitario habló sobre la última temporada, toda su etapa en los banquillos y el nuevo proyecto que encabeza como director deportivo
El pasado domingo, Manuel Luiggi Carrasco ‘Moli’ dirigía su último partido en el banquillo del BeSoccer UMA Antequera. Tras treinta años en él, la próxima temporada pasará a dirigir al equipo desde los despachos, como director deportivo. «Era impensable el cariño que sentido de la familia del fútbol sala», dijo el torremolinense tras ser preguntado en el programa polideportivo de SportDirect Radio, El Sprint, donde hablamos con él sobre su trayectoria, última temporada y el proyecto futuro.
Valoración de la última temporada: «No hemos cumplido con nuestro objetivo que era dejar al equipo en Primera División. Es lo que añorábamos todos, de decir, ‘oye como nos quedemos en Primera nadie nos va a quitar del medio’, porque vamos a aprender lo que necesitamos y lo que sobra. No me voy muy contento con un descenso porque me deja un mal sabor de boca».
Salidas de Amorós, Nando y Airoso: «Javi Amorós es un chico que lo cogí hace dos años en un campeonato universitario, me gustó la actitud que tenía y le dije que si quería venir y le encantó, ha hecho una campaña tan buena que le ha llamado un equipo que le ha hecho una oferta que era inalcanzable para nosotros. Nando también comenzó con nosotros desde los 15 años y, fíjate, la recompensa que ha tenido de firmar con el Palma una ficha de cinco años. Dani Airoso fue un chico que le ha costado adaptarse a esta liga tan exigente, no es todo lo que esperamos pero con la edad que tiene en unos años va a ser un gran jugador».
Su trayectoria como entrenador: «Estos últimos 30 años los voy a resumir en lo que me ha pasado en estas últimos dos o tres días. Era impensable el cariño que he sentido de la familia del fútbol sala, de todos los medios de comunicación, de todos mis compañeros… Ha sido muy emotivo todo lo que me ha ocurrido. Me ha superado y al final he visto que ha merecido la pena».
Tete, su sucesor en el banquillo: «Para mí, es el mejor que puede estar ahí, tanto él como Crispi. Aparte de su experiencia como jugador es muy conocedor de todos los entresijos del fútbol sala. Este año le he dado mucha cancha tanto en los entrenamientos como en los partidos para que se vaya soltando y cogiendo esa experiencia. Hay muchos entrenadores jóvenes pero también hay que ir formándose, porque en los banquillos se reciben muchos golpes y Tete este año ha probado lo que es la medicina del banquillo».
Consejo para recalcar a Tete: «Tete ya sabe lo que tiene que hacer. Es muy fiel a la filosofía universitaria, va a seguir el mismo ejemplo que yo he seguido 30 años en la casa: jugadores universitarios, formación… Hemos estado hablando, llevamos muchos años juntos y él sabe la idiosincrasia de nuestro club. Él tiene muchas respuestas y estoy confiado en que está preparado para competir en la categoría».
Sus luces y sombras como entrenador: «Para mí ha estado todo muy iluminado todo, porque sabía a donde me metía. Entré en el 92 y sabía que era filosofía universitaria, ya me dijeron que para ganar no vale todo, y la deportividad y fair play está por encima de todo. Tanto la directiva como el rectorado ha visto que no ha habido problemas todos estos años. Y la sombra, entre comillas porque hemos saboreado el jamón de pata negra, han sido los descensos a Segunda División.
Objetivo para la próxima temporada: «El objetivo es el de siempre, recuperar la categoría. Vamos a intentar mantener la base del equipo y desde el perfil de verlo desde mi nuevo cargo de director deportivo, analizar lo que necesita el equipo, si necesita algo más que donde estaba no podía ver. Trataré de mejorar algo que se nos haya escapado precisamente por si volvemos a ascender, no volvamos a descender».
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