Este Málaga tiene otro color
El conjunto malaguista se conforma con un empate en el debut de Mel donde mereció la victoria
Tuvo otro color el Málaga en el debut de Pepe Mel. A pesar de tener solo cuatro días de trabajo antes de este partido el nuevo técnico malaguista, las sensaciones son totalmente distintas del conjunto de Pablo Guede semanas atrás. Los malaguistas merecieron la victoria en un partido donde la segunda parte se volcó en ataque aunque no estuvo acertado para conseguir la victoria diez meses después en casa.
El conjunto blanquiazul saltó al campo con Reina; Juanfran, Escassi, Moussa, Javi J; Hervías, N’Diaye, Febas, Villalba; Gallar; Castro. Los ‘grogets’ con Gianni; Tasende, Mamadou, De La Fuente, Migue; Lozano, Alonso, Del Moral, Thiago; Arana, Collado.
El encuentro arrancó con muchas idas y venidas de ambos equipos, que querían mostrar su juego sobre el tapete de juego. El Villarreal se encontraba cómodo en el campo, con un Málaga bien plantado en defensa. El problema de siempre apareció pronto, las jugadas a balón parado. En un córner donde Villalba se queda mirando, Diego Collado saca una volea a la escuadra de la portería de Reina para ponerse por delante el cuadro filial de los amarillos.
El Málaga tenía que remar para igualar la contienda, aunque no costó tanto como en batallas anteriores. La combinación de ataque Castro-Gallar apareció seis minutos después del tanto inicial. Centro de Gallar al punto de penalti, Rubén entre centrales abre espacio y toca lo mínimo para desviar la pelota al fondo de las mallas en el gol de toooda la vida para el delantero malaguista que suma su segundo tanto.
El tanto sentó bien al equipo malaguista, que acabó la primera parte en área propia buscando el segundo. El Villarreal B sabía que tenía que arroparse para luchar un empate que les valía para colocarse en puestos de playoff. Tras el paso por vestuarios, el conjunto de Mel tuvo un importante arreón para llevarse la victoria. La falta de efectividad de Rubén Castro, que tuvo un remate de cabeza pegado al poste muy claro para poner el 2-1. La posición antirreglamentaria anuló un tanto al delantero blanquiazul que cruzó la pelota a las mil maravillas.
Con el equipo volcado en ataque, las ocasiones llegaban unas tras otras con la sensación que el Málaga dominaba el peso de las ocasiones en la recta final del partido. La entrada de Ramón o Chavarría aportaron mucho al equipo costasoleño que dejaba a un equipo amarillo totalmente replegado en defensa.
La pelota no entró y el Málaga empató, pero las sensaciones son totalmente distintas. Este equipo, ahora no, comenzará a sumar de tres en tres si es capaz de mantener el nivel mostrado y se notan mimbres para revertir la situación crítica, ya que el equipo malaguista es el colista de Segunda División.
