Las Palmas podría haber llegado al descanso con uno menos
Clemente realizó hasta dos entradas merecedoras de cartulina amarilla tras haber recibido la primera
Si el partido frente al Albacete no dejó muchas jugadas polémicas, el duelo entre Las Palmas y Málaga si que dejó lugar para ello. Posible expulsión, falta previa en el córner del 1-1…
El duelo comenzó con bastantes interrupciones. Gorostegui Fernández, colegiado del encuentro, trató de contrarrestarlas con tarjetas. De hecho, en el minuto 16, ya había mostrado hasta tres tarjetas amarillas. La primera, cometida por Clemente, y la segunda, cometida por Benítez, fueron muy claras, y es que el primero dio un codazo y el segundo derribó de forma temeraria al adversario. La tercera, que fue para Juande, fue algo más rigurosa. El central del Málaga golpeó al rival en una zona del campo intrascendente y con una fuerza aparentemente normal, aunque, para el colegiado, fue de forma temeraria.
La primera parte dejó lugar para la polémica, y es que Clemente, que ya vio la amarilla en el minuto 11, golpeó a Caye Quintana, derribándolo de manera similar a la acción en la que Benítez sí que vio la cartulina amarilla minutos antes. Además, el propio Clemente, poco antes del término de la primera parte, dio un manotazo a un jugador del Málaga, siendo más que motivo suficiente para que hubiese visto la segunda amarilla. Es cierto que en esa acción hay falta previa sobre Clemente, que fue empujado, pero el árbitro no lo vio y acabó señalando el manotazo sobre el atacante del Málaga.
La segunda parte arrancó con buen ritmo, y el árbitro, muy concentrado en todo momento, se colocó muy bien para acabar señalando penalti cometido por Álex Suárez, que vio la amarilla por derribar a un contrario estando el balón en disputa. El árbitro, a buen criterio y tal y como viene recogido en el reglamento, consideró que, al evitarse una ocasión manifiesta de gol y haber disputa de balón, debía mostrar amarilla. Sin embargo, el penalti no se llegó a ejecutar ya que, a instancias del VAR, se pudo ver como el balón salió del campo completamente en una acción previa.
Además, es importante destacar la buena y eficaz comunicación en el equipo arbitral. En la jugada previa a la que termina en el penalti, se produce una falta sobre Matos que, aunque el árbitro no concede en un primer momento, acaba señalizando a instancias de Palencia Caballero, 4º árbitro del encuentro.
En relación a las cartulinas amarillas, destacar el buen control que el equipo arbitral, liderado por Gorostegui Fernández, tuvo en los banquillos. El colegiado vasco no dudo en amonestar tanto a Pellicer como a Pepe Mel cuando consideró que sus protestas eran desmesuradas.
Para concluir con la actuación de Gorostegui tenemos que pasar por una de las jugadas claves del encuentro. En la acción que terminó en el córner con el que Las Palmas empató el partido hay una infracción cometida sobre Juande. Es cierto que Maikel Malsa centra la pelota y esta impacta en Juande, siendo por tanto saque de esquina. Hasta ese momento, ningún problema, pero la polémica llega en el centro del jugador del conjunto canario, y es que el atacante, al poner el centro, una vez golpea la pelota, eleva la rodilla y contacta de forma temeraria en la zona del estómago de Juande, teniéndo, por tanto, que haberse decretado falta sobre el defensor, por lo que el córner con el que Las Palmas puso el 1-1 definitivo no debió botarse.
Ya en los últimos compases del encuentro, Las Palmas anotó el 2-1. El asistente nº 1, Javier Merino Sánchez, hizo bien al dejar que el conjunto canario finalizara la jugada y, una vez acabada, levantó la bandera y el gol, tras ser revisado por el VAR, fue anulado.
