El Málaga CF entra en una buena dinámica de resultados y juego, pero el mensaje no debe salirse del objetivo principal de la temporada

Ya llueve bastante menos por Martiricos y por toda la afición malaguista. El conjunto blanquiazul se ha abonado a ganar de tres en tres en al menos tres de los últimos cuatro partidos ante rivales de entidad como el Rayo o rivales directos de la zona baja como el Sabadell o el Logroñés. Y algunos dirán que el equipo, a pesar de las bajas por lesión, de la irrupción de la cantera y del buen momento de juego del equipo, está para algo más que para no descender.

¡ERROR! Este mensaje ‘sobreoptimista’ ya se ha escuchado varias veces a lo largo de la temporada cuando el equipo entra en una buena racha. El Málaga CF tiene contados todos y cada uno de los puntos que consigue para llegar al final de temporada de la manera más liviana y tranquila posible. No se trata de ser poco ambiciosos, creo que el equipo nunca estuvo falto de ambición, pero siempre dentro de sus posibilidades, las cuales les da para estar en una situación mucho más cómodo de lo que ha estado buena parte de la temporada, pero nunca aspirando a entrar entre los seis primeros.

Recordemos bien de dónde hemos venido a lo largo de la temporada: este equipo ha estado cuatro meses sin ganar en casa, ha sido de los equipos más goleados de LaLiga SmartBank y cosechado algunas de las peores rachas negativas de la competición. Y con jugadores que si los ves hace unos meses pondríamos en tela de juicio si son válidos para un equipo de la categoría.

Y no hay que irse demasiado lejos para ver un ejemplo de lo que sería entrar a valorar cualquier otra cosa que no sea el objetivo principal de la salvación. La temporada pasada, el CD Numancia a estas alturas de competición tenía 38 puntos, a cuatro de los puestos de ‘playoff’ (el Málaga CF solo tenía un punto menos que los sorianos y ya sabemos también cómo se sufrió). Es verdad que el corte con los puestos de descenso era de menos puntos que en la actual temporada, pero probablemente muchos no esperaron que el equipo de Soria acabara bajando de categoría a falta de un tercio para el final del campeonato.

Toca admitir que todo lo bueno que se está haciendo en este tramo es algo que tenemos que grabarnos a fuego para el futuro y sentemos las bases de hacer algo más grande, quién sabe, para la próxima temporada. Pero todo esto siempre con ambición y humildad, como apunta el míster Sergio Pellicer en cada rueda de prensa.

José Néstor Triviño Martín

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