Una posible roja tempranera, muchas interrupciones y un descuento ínfimo en la primera mitad
Juan Ibiza, central del conjunto visitante, cometió varias faltas merecedoras de amonestación, pero sólo vio una amarilla
Málaga e Ibiza se enfrentaron en La Rosaleda en un partido en el que los visitantes vencieron por 0-5. El encuentro estuvo dirigido por el canario Raúl Martín González Francés, que a pesar del resultado tuvo, sobre todo, una primera parte con bastante trabajo.
En el minuto 4 tuvo lugar la primera acción que pudo suponer amarilla. En este caso Juan Ibiza propinó un manotazo en la cara a Brandon. Sin embargo, el árbitro no señaló falta y, por tanto, no amonestó al infractor.
En el minuto 10 llegó el primer gol del partido, que dejó lugar a una acción arbitral, quizás, no conocida por muchos. El atacante de la UD Ibiza lanzó a puerta y la pelota entró en la portería por poco, volviendo a salir rápidamente. Por tanto, Christian Valverde Monsalve, asistente n°2, lo hizo muy bien al levantar el banderín advirtiendo al árbitro de que el balón había entrado y acto seguido corrió en dirección al centro del campo.
La primera amarilla del partido llegó en el minuto 11 y fue para Herrera por sujetar de forma persistente a Febas, evitando con ello un ataque prometedor. El partido tuvo poco ritmo y muchas faltas e interrupciones. Una nueva amarilla llegó en el minuto 21 para Cifu, en este caso por un derribo temerario sobre Kevin en una acción en la que el defensor llega muy tarde.
Otra amarilla llegó en este caso en el minuto 26 para Juan Ibiza por una obstrucción muy clara sobre Roberto, evitando con ello un ataque prometedor. La acción puede dejar dudas entre un ataque prometedor (amarilla) o una ocasión manifiesta de gol (roja), pero el árbitro interpretó muy bien la situación ya que había otro defensor detrás. De haber visto la amarilla por la acción sobre Brandon en el minuto 4, Juan Ibiza habría sido expulsado por doble amonestación en el minuto 26.
Un nuevo manotazo llegó en el minuto 28, en este caso de Miki Villar sobre Javi Jiménez. El árbitro de nuevo no señaló falta y tampoco amonestó al infractor. Por otro lado, en el minuto 35, Brandon pudo ser amonestado por golpear a Diop en la cabeza con la rodilla, de forma temeraria. Sin embargo, González Francés no señaló falta.
En el minuto 39 tuvo lugar una acción en la que Roberto provocó dos faltas. La primera la cometió Juan Ibiza, que agarró a Roberto, tratando de evitar un ataque prometedor. El atacante siguió y el árbitro aplicó la ley de la ventaja para que, sólo unos segundos más tarde, Escobar terminara derribando al delantero. En este caso, el árbitro sí que enseñó la amarilla a Escobar por derribar a Roberto, evitando un ataque prometedor.
La primera parte no dejó polémicas en las áreas, pero sí numerosas amarillas y una posible expulsión por doble amonestación. Hubo poco ritmo y muchas cartulinas, las asistencias médicas tuvieron que entrar en varias ocasiones y hubo un cambio, pero aún así, el árbitro añadió un minuto, que no se corresponde al tiempo perdido en la primera mitad.
Si la primera parte fue muy completa en cuanto al trabajo para el equipo arbitral, la segunda parte cambiaría por completo. El resultado abultado dio lugar a un partido sin demasiadas complicaciones, dejando una segunda mitad con una única cartulina amarilla que fue para Ismael Casas por derribar de forma temeraria a un rival. El árbitro estaba muy bien colocado y mostró la cartulina al defensor.
En el minuto 70 Sekou reclamó penalti en una acción en la que el delantero cayó en el área en el momento en el que el guardameta visitante salió de la portería. En directo dio la sensación de que pudo cometer penalti, pero el árbitro estaba muy bien posicionado y contempló perfectamente la acción.
En el minuto 81 el colegiado expulsó a José Miguel González Rey, delegado de equipo del Málaga CF, por protestar una de las decisiones al cuarto árbitro de manera exaltada.
El descuento del partido fue de tres minutos, que se corresponde con el tiempo empleado en las ventanas de cambio que se dieron en la segunda parte, que tuvo mejor ritmo que la primera. El partido se saldó con un total de 29 faltas señaladas, cinco amarillas y una cartulina roja. No dejó polémica en las áreas, pero sí una posible expulsión y un gol fantasma en el que el equipo arbitral estuvo acertado.
