Pérez Pallas y García Verdura, desde la sala VOR, confirmaron la decisión del árbitro principal del encuentro
El Tenerife recibió al Málaga en el Heliodoro Rodríguez en un encuentro correspondiente a la jornada 6 de LaLiga SmartBank. El partido estuvo dirigido por el valenciano Iván Caparrós Hernández, mientras que Pérez Pallas actuó como VAR y García Verdura como AVAR.
El partido comenzó con numerosas infracciones por parte de los locales, que trataban de frenar el ritmo del Málaga. Tanto Sipcic como Borja Garcés o Carlos Ruiz cometieron varias infracciones en la primera media hora por las cuales pudieron ver alguna cartulina amarilla, pero el colegiado no lo estimó oportuno y ninguno vio la amarilla.
En el minuto 19, el Tenerife reclamó penalti por un leve agarrón de Bustinza dentro del área en una acción en la que el atacante pone mucho de su parte para ir al suelo. Sin embargo, el árbitro estuvo muy cerca de la acción y estimó que la acción no fue suficiente para señalar pena máxima.
La segunda parte arrancó con buen ritmo, pero la primera amarilla del encuentro no se hizo esperar y llegó en el minuto 53. Fue para Bustinza por un derribo temerario sobre Waldo. Poco más tarde, en el minuto 56, Bustinza vio la segunda amarilla por cometer, de nuevo, un derribo temerario en una dura entrada sobre el atacante del Tenerife. A pesar de las protestas de los jugadores del Málaga CF, el árbitro mostró la segunda cartulina al defensor.
La acción clave del partido llegó en el minuto 75, cuando el colegiado señaló penalti por un supuesto derribo de Juanfran. El colegiado señaló pena máxima y, a pesar que en las repeticiones se aprecia como la infracción es del atacante y no del defensor, Caparrós Hernández mantuvo su decisión y se ejecutó el penalti tras amonestar a Manolo Reina por protestar una de sus decisiones.
En el minuto 81 llegó una amarilla a N’Diaye por un derribo temerario. En el minuto 84 llegó el tercer gol del encuentro en una acción destacable, en esta ocasión de manera positiva, por parte del colegiado valenciano. El Málaga atacaba y Loren, situado en posición de fuera de juego, trató de jugar el balón, por lo que el asistente levantó la bandera para advertir al colegiado de la posición de fuera de juego. Viendo que el Tenerife salía a la contra, Caparrós Hernández aplicó la ley de la ventaja y esto desembocó en el tercer gol del Tenerife.
El descuento del encuentro fue de seis minutos, tiempo que se corresponde con las cinco ventanas de cambios empleadas. En estos seis minutos hubo tiempo para una amarilla a Ivan Romero por un pisotón temerario sobre Juanfran y, por otro lado, para Dani Lorenzo por un agarrón que evitó un ataque prometedor.
El partido se saldó con 27 faltas, seis amarillas, una cartulina roja y un penalti favorable al Tenerife que ha dejado lugar a un amplio abanico de críticas, ya que al ver las repeticiones se aprecia como la infracción no es cometida por Juanfran, sino que es Juanfran quien es objeto de falta. Sin embargo, desde el VAR estimaron que la decisión tomada en el terreno de juego por el colegiado principal fue correcta.
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