Pocas faltas, poco ritmo y muchas tarjetas en un Málaga-Girona sin polémica

El partido acabó con diez amarillas, una roja y no dejó jugadas polémicas en las áreas

Málaga y Girona se enfrentaron en un partido correspondiente a la jornada 5 de LaLiga SmartBank. El partido, que tuvo lugar en el Estadio de La Rosaleda, estuvo dirigido por el colegiado cántabro José Antonio López Toca. El duelo dejó una elevada cantidad de tarjetas, pero no hubo polémica en las áreas.

La primera tarjeta se hizo esperar, aunque en el minuto 23 Víctor Gómez sufrió un agarrón cuando salía al contraataque. Sin embargo, López Toca no consideró esa acción como ataque prometedor y no mostró la amarilla.

En el minuto 35, Jairo agarró a Paulino cuando este se disponía a centrar la pelota y a entrar en el área. El árbitro concedió la ventaja pero el balón salió del terreno de juego debido al agarrón y

Si anteriormente el colegiado aplicó la ley de la ventaja y perjudicó al Málaga ya que perdió la pelota y debió haber señalado la infracción, en el minuto 38 López Toca sí que aplicó bien la ley de la ventaja en una acción en la que hay falta sobre Brandon. El Málaga continuó con la pelota y gracias a esa aplicación de ley de la ventaja el conjunto malaguista llegó al área del Girona.

Si en la primera parte no vimos ninguna cartulina amarilla, poco se hizo esperar la primera amarilla. Fue para Calavera en el minuto 47 tras derribar de forma temeraria a Kevin en una acción que tuvo lugar en el centro del campo. Kevin tuvo que ser atendido por las asistencias médicas, pero al tratarse de una acción que entrañó amarilla el jugador malaguista no tuvo que salir del terreno de juego.

A raíz de esta primera tarjeta, las amarillas se fueron sucediendo de manera persistente. Poco después, en el minuto 60, Alejandro Baena derribó claramente de forma temeraria a a Luis Muñoz. El árbitro aplicó la ley de la ventaja en esa acción y gracias a ello el Málaga logró acabar la jugada con un tiro a puerta y una vez finalizada esa acción el árbitro paró el juego y mostró la amarilla y solicitó la entrada de las asistencias médicas.

Poco más tarde, en el minuto 62, una nueva amarilla llegaría para un jugador del Girona. En este caso para Kebe por golpear con el brazo en la cara de Kevin. La acción se sucedió a escasos metros del cuarto árbitro, que fue el que advirtió a López Toca del contacto y de que era merecedora de cartulina amarilla. Esa acción fue protestada por el entrenador del Girona, que fue amonestado tal y como se reflejó en el acta por: “Poner reparos a una decisión mía desde su banquillo”. Además, en ese mismo momento Dani Barrio vio la cartulina amarilla por discutir con un contrario sin llegar a insultos ni a la amenaza.

El partido cogió cierta ritmo y hasta el minuto 82 no hubo una nueva cartulina. En este caso fue para Pol Lozano por sujetar a Luis Muñoz cuando este se disponía a sacar la pelota jugada. A raíz de este momento el partido perdió mucho ritmo, y en el minuto 84 Michel, entrenador del Girona, fue expulsado por roja directa por, tal y como López Toca reflejó en en acta: “Por protestar de forma airada una decisión mía, realizando gestos ostensibles y abandonando su área técnica”. Fruto de la expulsión del técnico, Nahuel Bustos vio la amarilla por protestar, desde el banquillo, la decisión del colegiado.

La tensión, fruto del resultado, era muy elevada. El Málaga trató de que el partido tuviera el menor ritmo posible mientras que el Girona quería aprovechar el tiempo lo máximo posible. Fruto de esos intentos de pérdida de tiempo, Dani Martin vio la amarilla en el minuto 90 por perder tiempo en el momento en que debía sacar de puerta.

La última amarilla del partido fue para Jozabed por discutir con un contrario sin llegar al insulto ni a la amenaza. El duelo terminó con un total de 22 faltas y un total deoc 10 amarillas, ho para jugadores de campo y dos para miembros del banquillos, y una roja para el técnico del Girona. No hubo polémica en el apartado de las áreas y el VAR no tuvo que intervenir ni corregir al colegiado.