Los Muñoz se lucen y despejan las dudas del Málaga sin Chavarría
El Málaga se lleva los tres puntos ante el Sabadell en La Rosaleda, en un partido igualado y cerrado hasta el gol del equipo malaguista
El Málaga suma los tres puntos y de esta forma confirma que con un buen juego se gana más de lo que se pierde. Se desquitó de la derrota en Anduva a pesar del buen juego. Hoy ha vuelto a realizar un buen partido, al menos tras el gol fue un asedio a la portería del equipo rival. Y el premio fue una victoria, para alejarse más del descenso y acercarse a la zona de media tabla. Un partido importante para subirse cuánto antes al barco de la salvación.
El equipo de Pellicer tenía que verse sin Chavarría, que se perderá el resto de la temporada por una lesión en la rodilla. Arrancó con Ismael por banda y Caye en sustitución del argentino como 9. El resto lo esperado, aunque se cayeron de la lista Orlando y Ramón por unas molestias previas al partido. Soriano entró en el once por Dani Barrio.
Los primeros compases del partido fueron muy igualados, con un Sabadell muy echado al ataque. El Málaga también quería ofrecer una buena imagen y así lo hizo. Los dos equipos mostraban una imagen muy vistosa, pero poca efectividad e intentos de cara a un disparo a puerta no muy peligrosos. La primera parte se saldó con una tremenda igualdad, alguna llegada del Sabadell rozando la portería de Soriano sin efectividad. Por parte de los locales, lo intentaba Yanis de forma muy tímida.
En la segunda parte todo se debía decidir. El empate a cero del primer asalto provocaba que los dos conjuntos se vieran obligados a arriesgar para llevarse los tres puntos. Los primeros minutos fueron similares a lo mostrado en la primera parte, con ambos conjuntos intentando adelantarse en el marcador. En los peores momentos, el Málaga suele hacerse grande. Hoy el fútbol sí ha sido justo con el Málaga, que estaba siendo ligeramente superior al Sabadell.
Todo se ve complicado con el empate a cero, intentando marcar el primero y viendo la escasez de goles que el equipo malaguista tiene. Pero ante eso, aparecieron los Muñoz. Van a dar mucho que hablar, estoy seguro. El primero de ellos, Joaquín arrancó la jugada del primer gol desde la banda. Supo tener el temperamento suficiente para esperar a que sus compañeros llegaran desde segunda línea para rematar un posible centro. Le salió un envío teledirigido al segundo palo, donde le esperaba su compatriota Luis Muñoz para mandar el esférico al interior de la portería. La tarea más difícil ya estaba cumplida, anotar el primero, eso que tanto cuesta en cada partido. Y a partir de ahí, todo fue sobre ruedas.
El Málaga desplegó un fútbol vistoso, de ataque y sobre todo, con hambre de marcar el segundo y cerrar el partido. Fueron los mejores minutos del partido, aunque también dejaron malas noticias. Ismael tuvo que ser sustituido en camilla quejándose de un dolor en la rodilla. Los peores presagios se volvieron a reflejar en el Málaga, que tiene ya a dos jugadores lesionados de la rodilla y se perderán el resto de la temporada.
El equipo malaguista no sufrió en exceso durante esos minutos. Pero con los cuatro minutos de añadido iba a sufrir todo lo que no sufrió a lo largo de la segunda mitad. El Sabadell, a la desesperada lo intentaba continuamente con el punto flaco del Málaga: los centros a balón parado. Soriano despejó un centro a córner y varios disparos desde el interior del área intentaban robar tres puntos al equipo malaguista. Pero hoy salía todo bien. Le pitaron un penalti al Málaga siete meses después y ahí estaba capitán Luis Muñoz para aprovechar el lanzamiento desde los once metros. Lanzó a la derecha y no falló. Marcó un doblete y despejó las dudas.
El Málaga esta vez jugó bien y además ganó el partido. Una victoria clave para seguir lejos del descenso y mantenerse en la zona media de la tabla. La baja de Chavarría es una piedra en el camino, pero como dijo Pellicer «saldremos adelante, confiamos en nuestros jugadores». Y eso lo llevó al dedillo en entrenador, cumplió con lo prometido y vence en un encuentro clave para la salvación.
