Balonmano Málaga, nueva víctima de la situación precaria del COVID-19
El club malagueño se retira de Primera Nacional debido a la insuficiencia económica y la ausencia de ayudas tras las secuelas de la pandemia mundial
El deporte en este país se sustenta en personas que dan todo para que los más pequeños disfruten y aprendan en un entorno sano. No obstante, el buen trabajo durante años en el seno del Club Balonmano Málaga se vio recompensado el pasado verano de 2019, cuando en una gesta única consiguieron el ascenso a Primera Nacional.
Tras dicho ascenso lograron hacer una temporada de sobresaliente como debutante en la categoría. En las primeras jornadas fueron uno de los equipos más solventes de la competición y de los que más tardaron en caer por primera vez en dicha campaña. Finalmente ocuparon la sexta plaza de su grupo, con la salvación conseguida con mucha solvencia en una sexta plaza que dejaba a los malagueños más cerca de los puestos de ascenso que de descenso.
Un año después de aquel histórico ascenso labrado por los de Nacho Torres, el conjunto de la provincia malagueña ha decidido renunciar a la plaza en la categoría de bronce, debido a las secuelas económicas del COVID-19, tanto en el ámbito económico como sanitario.
Por tanto, el pasado lunes de 19 de octubre se acordó en sesión extraordinaria de manera unánime la retirada de la competición y procedió a comunicarse al Comité de la Real Federación Española de Balonmano, para oficializar y formalizar los procedimientos pertinentes derivados de la salida de la competición.
